miércoles, 18 de abril de 2012
San Antón... ¡nos salvamos!
Este día yo estaba de guardia o algo así; Sandra me pilló con la guardia baja (valga la redundancia) y me preguntó que si no me importaba que llevara a los perros a bendecirlos.
Bueno... (contesté no muy convencida).
Al fin y al cabo tampoco les iba a pasar nada malo. Más bien temía por Cuzco, a ver si le iba a empezar a salir humo de la cabeza.
Allá se fueron Sandra y una amiga con los tres perros.
Por suerte había tanta gente, que se cansaron de esperar y se marcharon.
¡Este año nos salvamos chicos!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me da que si a Bicho lo rocían con agua bendita entraría en combustión espontánea XDD Es como el Damien de los perros XDD
ResponderEliminar